Buque insignia del catálogo de giradiscos de Pro-Ject, el Signature 12.2 se aprovecha de los avances técnicos puestos a punto por el reputado fabricante austriaco con el objetivo de ofrecer unas cotas de excelencia incluso superiores a las de su predecesor, el celebrado Signature 12.
En su condición de producto de referencia absoluta, el nuevo Pro-Ject representa, adoptando el ampliamente contrastado principio de la tracción por correa, el no va más en tecnología, materiales y acabados, hasta el punto de ser hecho enteramente a mano por los profesionales “top” de la marca. A fin de hacerse una idea del nivel de exigencia involucrado, baste con saber que todas las partes metálicas, en concreto más de 100 y mecanizadas con CNC, son producidas en las instalaciones de la firma centroeuropea y pulidas manualmente, necesitándose nada menos que 2 días para completar cada unidad del Signature 12.2.
Entrando ya en los detalles de esta fabulosa máquina destinada a llevar hasta el límite las posibilidades del decano de los formatos analógicos de audio, habría que destacar en primer lugar el uso de un chasis de MDF de alta masa, esquinas redondeadas y libre de espacios huecos y una lujosa terminación que requiere nada menos que 10 capas de pintura. A ello se suma la presencia de un subchasis, algo habitual en los giradiscos ligeros pero que también puede resultar extraordinariamente útil en diseños masivos.
Otro elemento clave, el brazo de lectura, ha sido objeto asimismo de un cuidado excepcional, al pasar de ser unipivot a incorporar un esquema pivotante de 3 puntos cuyo preciso alineamiento permite una reducción adicional de la fricción y mejorar la estabilidad. Este lector de vinilos de referencia absoluta se completa con robustos pies de sustentación ajustables que combinan puntas cónicas con muelles de alta precisión y lograr un desacoplo virtualmente perfecto
Características:
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